"Des-hogaradas", una ficción marplatense de cinco capítulos filmados con teléfonos celulares. Busca hacer visible el tema de la violencia machista que se agudizó en tiempos de encierro. Se la ve por Facebook, Instagram y por Youtube.
“Ellas no tienen hogar, en realidad nunca lo tuvieron, porque un hogar es un lugar para vivir tranquilas y bien, por eso tienen que irse”. La actriz, directora teatral y dramaturga Olivia Diab es quien explica por qué su nuevo proyecto colectivo lleva el título de “Des-hogaradas”.
Se trata de unitarios filmados que se pueden ver en las redes sociales (Instagram, Facebook y también en Youtube). Ya está disponible el primero, pero están proyectados otros cuatro que completan la serie de capítulos. Todos tienen un tema en común: la violencia machista que, sobre todo, padecen muchas mujeres en tiempos de encierro.
“Notamos que había pasado un día de cuarentena y había un femicidio, pasaban dos días y había dos femicidios, en un momento sobrepasó el número de muertas. Hablábamos sobre lo difícil de estar obligada a convivir con la persona que te provoca violencia”, acotó Diab a LA CAPITAL y definió a esta serie como un gesto de militancia dentro del feminismo.
Cómo se sabe, las cifras de femicidios se dispararon en Argentina durante esta cuarentena: de acuerdo al Observatorio “Ahora que sí nos ven” hasta el 6 de julio pasado se produjeron 162 femicidios en el país durante 2020.
Estas ficciones, en las que siempre un personaje femenino se ve obligado a abandonar su casa por vivir una situación de violencia machista y llega a un refugio de mujeres, nacieron para exponer el tema, hacer visible la problemática y llevar conciencia sobre las diversas maneras de violencia que existen: no solo el golpe, también la desvalorización y el maltrato psicológico tienen lugar entre las tramas de “Des-hogaradas”.
El colectivo de actrices, que también forman Nathalia Zapata, Natalia Escudero, Agustina Monkiki Forace, Jimena Angelini y Cecilia Leonardi, decidió que las historias narradas tuvieran una salida, una suerte de resolución positiva. Por eso, además, cada personaje que llega al refugio tiene un nombre simbólicamente luminoso: Victoria, Gloria, Esperanza, Libertad y otros.
A pesar de la contundencia del tema, las actrices se las ingeniaron para colocar pinceladas de humor a cada historia, un detalle que fue trabajado junto a la psicóloga Patricia Gordon. “Como el tema es delicado, teníamos miedo de provocar lo opuesto a lo que perseguíamos”, confió Diab, por eso se asesoró.
La serie comienza con una placa en la que se sugiere cómo actuar cuando alguien conoce a una mujer que sufre violencia machista. Se puede llamar a la línea gratuita 144 o al 108, para asesoramiento y contención.
Grabada con teléfonos celulares, “Des-hogaradas” es una serie de cerca de diez minutos de duración que busca realizarse con la menor cantidad de tomas y cortes, para simplificar la edición.
Además, no tiene guión, cada trama se va armando a medida que se sucede la llegada de cada nueva mujer al refugio. “No es cine, no es teatro, no es improvisación, es cine-teatro-impro”, acotó Diab, quien sumó al equipo técnico a Ignacio y Manuela Centurión y a Franco Martín, quienes asisten desde la distancia.
Diab y Zapata fueron las responsables de llevar a cabo Haikus marplatenses, otra serie de videos que buscó mostrar que los artistas de Mar del Plata son trabajadores de la cultura que, en tiempos de teatro y salas cerradas, necesitan de la ayuda del Estado Municipal.
Para darle un cierre a los Haikus, el colectivo decidió vincular las dos acciones audiovisuales gestadas en plena cuarentena. Por eso uno de los capítulos de “Des-hogaradas” tendrá relación con el último Haikus.
En tanto, las personas que deseen podrán ayudar al colectivo de actrices que trabaja en la creación de estas historias. Las colaboraciones se reciben en el CBU 0140323503420059265486 (del Banco Provincia).
Mirá el primer capítulo acá: